Parece que los estadounidenses se están acostumbrando a la imprevisibilidad de los viajes durante la pandemia, ya que muchos ahora están abrazando esta era de incertidumbre y mostrando un comportamiento muy espontáneo cuando se dirigen a sus escapadas.
Dado que, en los últimos dos años y medio, los efectos del COVID-19 obligaron a los viajeros a ser más flexibles en sus planes y reservar sus viajes relativamente en el último minuto, algunos vacacionistas ahora parecen estar llevando esa tendencia al extremo. De hecho, un espíritu de espontaneidad y flexibilidad está emergiendo como la nueva norma en los viajes.
Cómo COVID-19 provocó la espontaneidad
La demanda reprimida y las frustraciones latentes producidas por más de dos años de
restricciones de viaje globales han llevado a los estadounidenses a adoptar un enfoque más improvisado, prefiriendo hacer arreglos de viaje en el momento oportuno.
La evidencia proviene de una encuesta reciente realizada por el metabuscador de viajes Skyscanner, que reveló que más de la mitad (53 por ciento) de los encuestados estadounidenses han reservado viajes a destinos de los que no saben nada. Aún más impactante es el descubrimiento de que más de la mitad de los participantes estadounidenses (56 por ciento) llegaron al aeropuerto sin ningún destino en mente.
Según el estudio, la jet set estadounidense se enorgullece de su naturaleza aventurera, con más de las tres cuartas partes del grupo encuestado (77 por ciento) diciendo que se consideran espontáneos. El cincuenta y cuatro por ciento de los encuestados informaron haber reservado previamente un viaje espontáneo y casi la mitad (46 por ciento) de ellos dijeron que se sentía más emocionante.
Entre los participantes de la encuesta de EE. UU., el 68 por ciento estuvo de acuerdo en que la pandemia obstaculizó su capacidad para irse de vacaciones de manera espontánea, lo que resultó en la tendencia de "viajes de venganza" que ha caracterizado en gran medida el 2022.
La experta en viajes globales de Skyscanner, Laura Lindsay, explicó: "El impacto de la pandemia y las restricciones de viaje en constante evolución han reavivado el apetito por los viajes espontáneos, con tres cuartas partes de los encuestados de EE. UU. (75 por ciento) diciendo que los eventos de los últimos dos años y medio años y medio les han hecho querer ser más espontáneos".
Los beneficios de los viajes improvisados
Skyscanner también consultó a la prestigiosa psicóloga Emma Kenny para examinar la psicología detrás de esta nueva tendencia y los beneficios de los viajes espontáneos. Ella explicó: “Un estrés común es la toma de decisiones involucrada en el proceso de planificación de vacaciones. Esta es la razón por la que renunciar a la organización metódica que tan a menudo va de la mano con unas vacaciones planificadas y, en su lugar, elegir disfrutar de un descanso improvisado puede ser tan liberador. Añadió: “Nada es tan emocionante como ver un lugar nuevo por primera vez, y la emoción y la gratificación instantánea que conlleva.
“Si bien puede parecer aterrador simplemente empacar una maleta y subirse a un avión para arriesgarse en un destino desconocido, se beneficiará psicológicamente, ya que esto crea una actitud de 'puedo hacerlo' y le recordará las posibilidades ilimitadas que existen. allá. Y debido a que no tiene una agenda o planes claros, cada paso que dé implicará una sensación de aventura, que es verdaderamente liberadora".
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